INTRODUCCIÓN
Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) pueden contribuir al acceso universal a la educación, la igualdad en la instrucción, el ejercicio de la enseñanza y el aprendizaje de calidad y el desarrollo profesional de los docentes, así como a la gestión dirección y administración más eficientes del sistema educativo. Desde diferentes posturas se ha argumentado que la presencia de recursos tecnológicos en ambientes educativos contribuyen a mejorar la forma cómo se aprende. Sin embargo es de anotar que existe poca evidencia concreta que esto así sea. Es más la "onda" positivista frente a las posibles bondades de los recursos, que lo que se pueda en efecto haber comprobado.
Las TIC pueden conducir a mejorar el aprendizaje del estudiante y los métodos de enseñanza.Un informe realizado por el Instituto Nacional de Educación Multimedia en Japón, demostró que un aumento en la exposición de estudiantes a las TIC mediante la integración curricular de educación tiene un impacto significativo y positivo en el rendimiento estudiantil, especialmente en términos de "Conocimiento · Comprensión" · "habilidad práctica" y "Presentación de habilidad" en materias tales como matemáticas, ciencias y estudios sociales.